El consumo real de combustible y energía de los coches y furgonetas nuevos se recopilará a partir de 2021 en virtud de un nuevo Reglamento de aplicación adoptado ayer por la Comisión. Estos datos permitirán monitorear la brecha entre la aprobación de tipo y las emisiones reales de CO 2 , y brindarán una mejor comprensión de cómo se desempeñan los vehículos en condiciones de conducción del mundo real.
Todos los automóviles nuevos comercializados en la UE en 2021 estarán equipados con un dispositivo de medición a bordo que registra el combustible o la energía consumida por un vehículo cuando está en uso.
El Reglamento de Ejecución adoptado ayer prevé la recopilación de esos datos por parte de los fabricantes cuando se llevan vehículos para su reparación o servicio, y por los Estados miembros cuando los vehículos se someten a inspecciones técnicas periódicas. Los primeros datos se recopilarán de los vehículos nuevos vendidos en 2021 y se informarán a la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) a partir de abril de 2022.
Los propietarios de vehículos tienen la opción de detener la recopilación de datos. Los fabricantes, los Estados miembros, así como la Comisión y el EEE deberán asegurarse de que la recopilación y la notificación de datos sean coherentes con las normas del Reglamento general de protección de datos (GDPR).
Los datos se utilizarán para monitorear la brecha entre las emisiones de CO 2 determinadas en la aprobación de tipo por la autoridad nacional pertinente antes de que el vehículo se comercialice y las emisiones de CO 2 del mundo real de un vehículo para garantizar que la brecha no aumente con el tiempo. La medición de esta brecha permitirá a los consumidores comprender mejor el rendimiento de los vehículos en condiciones reales y ayudará a garantizar que los objetivos de reducción de emisiones de CO 2 sigan siendo eficaces.
Bajo el antiguo procedimiento de aprobación de tipo, el Nuevo Ciclo de Conducción Europeo (NEDC), la brecha entre la aprobación de tipo y las emisiones del mundo real creció al final a casi un 40%. Esta fue una de las razones para la sustitución de ese procedimiento por el Procedimiento de prueba de vehículos ligeros armonizado a nivel mundial (WLTP) en 2017, y la introducción de dispositivos de medición de consumo de combustible a bordo. La recopilación de datos del mundo real es la primera medida de implementación adoptada bajo los estándares de emisiones de CO 2 que entraron en vigor el 1 de enero de 2020.
A partir de diciembre de 2022, la Comisión publicará los datos del mundo real cada año en un formato agregado, con el objetivo de mostrar la diferencia entre la aprobación de tipo promedio y las emisiones de CO 2 del mundo real para la flota de vehículos nuevos de cada fabricante.
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